Nueva York, específicamente en Long Island

En el estado de Nueva York, específicamente en Long Island, se encuentran varias granjas dedicadas al cultivo y cosecha de la calabaza tradicional de Halloween. Por lo que resulta un punto de atracción para los pobladores de la zona y para las personas que viven en la ciudad de Manhattan. Por lo que a continuación explicaré, cómo es que esta actividad está formada por los tres sectores económicos y como se relacionan entre sí.

 

La producción de calabaza es una fuente de ingresos y una tradición para esta zona del estado de Nueva York, y para su cosecha en temporada otoñal, las personas encuentran muy atractivo, sobre todo a nivel familiar, el acudir a unas de estas granjas donde uno mismo puede cosechar calabazas y otro tipo de frutas o maíz; además de disfrutar de otras actividades recreativas, que son muy divertidas sobre todo para los niños.

 

Es parte de la tradición, recolectar tu propia calabaza; ya sea para decorar tu casa o para cocinarla, es por eso que las personas se trasladan desde las más grandes ciudades, hasta el campo, para poder llevar a cabo esta tradición y divertirse un rato.

 

Estas granjas además de ofrecer productos frescos son generadoras de empleos y atractivos turísticos para esta región.

 

¿Cómo se relacionan entre si esos sectores económicos?

 

Sector primario: este sector lo cubren totalmente porque el hecho de utilizar la cosecha de este producto, comprueba el uso de la naturaleza como fuente de las calabazas. Además de que se valen de otros productos más para hacer más atractivas sus granjas durante todo el año y no solo para el otoño. Por ejemplo se cosechan manzanas, duraznos, maíz, uvas, moras y se pueden comprar flores de varios tipos.

 

Sector secundario: mediante la producción de diferentes productos como mermeladas, pies de manzana, de calabaza, etc. Maíz cocinado, pizza, limonada, sangría y otros productos más. Además de la creación de la infraestructura necesaria para la llegada de los turistas, como espacios para estacionar carros y autobuses, baños públicos, área de venta y servicio de alimentos, área de entretenimiento (paseos en trenecitos jalados por un tractor, juegos, laberintos elaborados con bultos de paja o de plantas, etc.) es como se reflejan las actividades de este sector.

 

Sector terciario: la principal actividad de éste sector es la atención a todas las personas que llegan a las granjas, normalmente se cobra una cantidad específica por hacer uso de las instalaciones más todo lo que uno consuma ahí. Tienen personal que cuida las cosechas, que te guían y ayudan con las calabazas, inclusive tienen algunos animales de granja, que los niños pueden tocar; por ejemplo ponis, patos, gallinas, conejos y puerquitos con los que se hacen carreras.

 

Por otra parte se encuentra el personal que atiende en la zona de alimentos o en la venta de los productos que la misma granja genera; así que con el trabajo de cada una de estas personas se cubre el sector terciario.

 

 

¿Cómo se relacionan con el turismo?

 

Estos lugares además de ser una fuente de ingresos, de empleos y de venta de productos naturales para los habitantes de la región, ya son muy populares, así que se han creado tours desde la ciudad de Nueva York que llevan a los turistas hasta estas granjas. Además que muchas escuelas, año tras año, organizan viajes para los alumnos en diferentes temporadas del año, tanto para recoger su calabaza de Halloween; como para conocer los animales o las diferentes frutas que se producen en Long Island.

 

Las temporadas más altas en cuanto oferta de empleos e ingresos para las granjas, son el verano y el otoño, pero sobre todo el verano, porque gracias al clima tan agradable las actividades al aire libre son lo que más buscan los habitantes de ésta región. Aparte ofrecen empleos para estudiantes que disfrutan de sus vacaciones de verano.

 

Es por eso que aunque es una actividad local, es un atractivo cultural y natural que hace que las personas se muevan de su lugar de origen para disfrutar de esos lugares por unas horas o quizá por unos días; dependiendo de qué otras actividades deseen hacer como ir a la playa, conocer el faro del final de la isla, ir a los Hampton o bien solo ir a comprar a los outlets, que también son puntos de interés en Long Island.