Todas las áreas de un establecimiento de alimentos y bebidas son importantes y se tiene que tener especial cuidado en su distribución, mobiliario, equipo y medidas de seguridad que requieren, todo esto para una mejor funcionabilidad del negocio.
Si hablamos de la industria de alimentos y bebidas, una parte que por ningún motivo debe descuidarse es la frescura, calidad e higiene de los alimentos, la manera de conservación y la caducidad de cada uno de estos, de tal manera que el lugar destinado para almacenar los insumos debe cubrir las necesidades del establecimiento.
El tamaño y distribución de este dependerá de la cantidad de producto que se requiera almacenar y cada cuando será surtido, una vez determinado esto podemos empezar a planear donde estará ubicada esta área y el mobiliario que se necesita," un almacén siempre debe contar con anaqueles de buena calidad y cajas corredizas con ventilación o con balanceo para guardar semillas o producto a granel.
Debe tener suficiente aire para evitar que los productos se descompongan, también debe tener tarimas de madera para colocar costales y evitar la humedad" (Sánchez, 2008).
Otro punto a considerar es que si las ventanas están hacia la calle, tendrán que
adecuarse algunas cortinas para evitar que los rayos del sol descompongan los alimentos y contenga el paso a los roedores, se tiene que considerar un espacio amplio y que se pueda limpiar fácilmente, el cuidado del almacén es delicado ya que de no cubrir las temperaturas adecuadas, circulación del aire o estándares de almacenamiento los alimentos pueden descomponerse y acelerar la fecha de caducidad.
La forma de almacenamiento dependerá del volumen de alimentos que se pretendan manejar, aunque en eso una cosa es lo que se planea y otra es lo que pasa realmente, es decir, un establecimiento no sabe con exactitud la cantidad de suministros que almacenará hasta el momento de ver las ventas y los alimentos que los clientes prefieren.
Según Esteban Sánchez cuando se almacena es necesario mantener abiertos los
conductos de aire, ya sean naturales o por inyección, de lo contrario proliferan los hongos, se debe considerar poner en lugares frescos las frutas secas como nueces, piñones, pasas y cacahuates, legumbres y las frutas frescas a una temperatura no mayor de 13 grados centígrados.
También debe de considerarse dentro de la distribución de áreas una llamada economato, "espacio donde se almacenan los alimentos no perecederos y surten a la cocina" (Garcés, 2006).
Todo lo antes mencionado, al momento de la planeación de áreas debe tomarse en cuenta para que el diseño del almacén sea el más adecuado de acuerdo a las
necesidades operativas del establecimiento, se recomienda que no esté cerca de la cocina para evitar el calor que produce la misma y la combinación de olores que puedan absorber los alimentos que ahí se encuentran.
Cabe señalar que contar con áreas bien distribuidas, acondicionadas y con las medidas de seguridad mínimas requeridas beneficiará al establecimiento al haber menor cantidad de mermas y pérdidas.
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